En nuestro día a día todo pasa muy deprisa. Hay veces que la rutina e ir a esa velocidad no nos permite disfrutar de cada cosa que hacemos. Parar y disfrutar de momentos como preparar una comida, depende de nosotros. Quizá sea difícil hacerlo siempre, pero de vez en cuando no esta mal parar. Parar y disfrutar.
Disfrutar de poner la mesa bonita, preparar una receta que requiere un poco más de tiempo, invitar a la familia a comer, utilizar esos elementos que compraste hace poco y que nunca tienes tiempo de utilizar. En fin. Disfrutar de tu tiempo, de tu casa,...
1. tabla de cortar // 2. bol pequeño de madera // 3. bol de ensalada de madera // 4. cucharas de servir // 5. cucharas pequeñas de madera de haya // 6. servilleta de lino
La receta que hice ese día me la enseñó una amiga hace no mucho. Muy sencilla, pero muy rica. Pasta, tomates cherrry, dados de queso, canónigos y salsa pesto.
Online shop - www.luanord.com
Tienes razón, muchas veces desaprovechamos el tiempo y no disfrutamos de las maravillas que tenemos a nuestro alrededor, como en este caso, una sencilla y cuidada comida.
ResponderEliminarqué delicadeza todo María, es precioso
ResponderEliminarMM.... una receta rica rica y un espacio muy bello.
ResponderEliminarbesos
Nos ha encantado este post sobre slow food porque nuestro estudio también se basa en el movimiento slow ;) Nos fascinan todos tus productos y la historia que tienen detrás
ResponderEliminarUn abrazo,
Ana, Lara y Nahia
tienes razón, últimamente pasa todo muy deprisa....ui ya estamos a viernes...nada a disfrutarlo! un beso
ResponderEliminarMe encantan las ensaladas de pasta, y mas si están así de bien presentadas.
ResponderEliminar